Mai.

-Hay muchísimas cosas en la vida que me hacen feliz, pero tú eres una de ellas Maite. Desde que nos conocimos en el insituto, somos inseparables, ahora ¡nos confunden! Aunque lo más parecido que tenemos es el blanco de los ojos, como dices siempre. Pero bueno que te quiero, todo me lleva a quererte, prácticamente somos inseparables, hemos vivido muchísimos momentos juntas, buenos y malos, pero han sido mayoría los buenos. ¿Y si un día nos enfadamos y no volvemos a hablar? El destino lo quiso asi, pero de verdad, de corazón que yo no quiero que nos separemos, NUNCA. Y aunque te haya dicho que no quiero que seamos amigas, tú me conoces y sabes que digo paridas grandes como casas; y dentro de mi, si dejamos de ser amigas sería lo peor que hubiese  hecho. Bueno, ¿te he dicho que te quiero?